1. Inicio
  2. Electricidad, Electricistas y Averías Eléctricas
  3. Tarifas eléctricas

Tarifas eléctricas

Tarifas electricas, qué son

El mercado en España se divide principalmente en compañías dedicadas al transporte de electricidad y a la distribución. Hoy Red Eléctrica es quien se encarga de establecer una red de transporte de energía, la gestión, mantenimiento y eventual reparación de todas las infraestructuras de alta tensión.

Las empresas que se enfocan a la distribución, se encargan de llevar energía eléctrica a los clientes particulares. Son estas con las que los usuarios tenemos más contacto.

También contamos con empresas que producen y generan electricidad al mismo tiempo. Estamos hablando de empresas como Endesa, Iberdrola, Gas Natural o Fenosa entre otras. Estas empresas se dedican principalmente a generar grandes volúmenes energéticos, normalmente mediante centrales nucleares, plantas eólicas, solares e hidroeléctricas. 

De varias de estas empresas dependen aquellas que comercializan la electricidad que estos producen. Estas empresas compran energía eléctrica y la revenden a sus clientes o otros comercializadores. 

Tarifas electricas

¿Qué opciones de contratación hay?

Siempre y cuando tu consumo sea igual o menor a 10kW o menos, tienes tres modelos posibles:

PVPC o Precio Voluntario al Pequeño Consumidor: es la opción más común. Esta es una cuota regulada, en la que el precio final depende de las cifras que el mercado eléctrico imponga durante cada periodo de facturación. Es decir, un precio final bastante inestable. 

Otro camino es optar por contratos de mercado libre, que ofrecen ofertas a un precio fijo por año que buscan eliminar la inestabilidad del PVPC. 

Por último, con la posibilidad de facturar la energía por horas, han surgido alternativas a precios fijos. Estas empresas ponen un precio estable a cada kilovatio/hora; y aunque parezca bastante cómodo al comienzo, si no vas con cuidado los costes irán creciendo. 

Variaciones en los precios en España

En España las variaciones en los precios se deben principalmente por el déficit de tarifa. El déficit de tarifa se trata de una deuda que los españoles tenemos desde hace años. Cuando los ingresos provenientes de los consumidores son menores a los gastos que estos generan en la red, se genera un déficit monetario que debe ser subsanado. 

Luego entran en juego los gastos de mantenimiento y transportes necesarios para que la energía llegue a nuestros hogares. 

También se tiene en cuenta el coste de la energía. Se trata del coste que los usuarios pagamos por el kilovatio cada hora. Este coste se define en el contrato que se firma con la empresa distribuidora. En caso de tener una tarifa regulada, el precio de esta tarifa se calculará en base a  los precios del mercado mayorista durante los meses de facturación.

Por último la potencia contratada. Es la potencia eléctrica, expresada en kilovatios, que el cliente compra al mes. La cantidad contratada depende de las necesidades energéticas de cada hogar. Esta potencia pone un tope en la cantidad de energía que podemos consumir. De estos cuatro elementos, este último es sobre el que más control podemos ejercer. Los precios de la potencia han ido en aumento. Si reducimos algunos tramos en la potencia contratada podremos abaratar costos. Pero se debe estudiar prebiamente y evitar perder calidad en el servicio eléctrico. 

Para realizar este estudio, haz un inventario de aparatos que están constantemente consumiendo energía. Después, calcula la potencia necesaria para mantenerlos funcionando. Frigoríficos, lavadoras, lavavajillas y demás. Una vez calculada esta demanda,puedes sumar unos kilovatios para gastos variables y con el resultado total anotado, contacta a tu compañía distribuidora para realizar el cambio de potencia contratada. 

Otros métodos para reducir gastos

Te contamos cinco maneras sencillas que te asegurarán unos euros extra a fin de mes. 

1. Evitar la “energía vampiro”

Muchos electrodomésticos aún apagados siguen en funcionamiento, chupando electricidad hasta formar casi el 10% de nuestro consumo anual. Esto se resuelve de manera sencilla: Solo debes desenchufar televisores, ordenadores, hornos, si no estan en uso.

2. Modo Eco 

La mayoría de electrodomésticos actualmente vienen con una modalidad de bajo consumo. Acostumbráte a usarlos. Aunque puedas tardar un poco más en realizar las tareas ahorrarás hasta un 40%. Si no tienen este modo, puedes pensqar en invertir para renovar tus electrodomésicos.

3. Bombillas de bajo consumo 

A pesar de ser más caras que las bombillas tradicionales, los LEDS y las bombillas de bajo consumo duran mucho más y consumen menos. Renovar tus bombillas puede significar casi 200 euros ahorrados por año.

4. Moderar el uso de aparatos

Las cocinas eléctricas, muy comunes en España, son cómodas y más seguras. Pero hay que saber usarlas inteligentemente. Por ejemplo, utiliza recipientes del tamaño adecuado a cada vitro para no desperdiciar calor. En invierno, hay más gasto con el uso de radiadores. Puedes considerar medios alternativos, o solo encenderlos cuando sea realmente necesario.

5. Comparar precios. 

Considera comparar tarifas hasta encontrar la que se acomode más a tus requerimientos. Se ofrecen muchas alternativas al típico contrato PVPC.

Si necesitas más información acerca del ahorro energético o de cualquier otro tema, entra en nuestra web arreglos.biz. Podrás encontrar las mejores empresas y profesionales de varios sectores. Contacta con nodotros y recibe tu presupuesto de manera gratuita.

También te puede interesar:

Menú